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28.4.06
Vuelve a rodar un proyecto para reformar la bandera provincial (Santa Fe, Argentina)
La Semana de los Pueblos Originarios, que finalizó ayer, fue también el momento propicio para que el Concejo Municipal desempolvara un proyecto que atiende un viejo reclamo de los movimientos indigenistas. El presidente del bloque del ARI, Nire Roldán, volvió a pedir que el cuerpo gestione ante la provincia la reforma del escudo y la bandera provinciales. En ambos símbolos, con sus dos flechas volcadas cruzadas por una lanza con la punta en alto, se representa "la barbarie del salvaje vencida por la lanza del caballero cristiano", según destaca más de un historiador. La iniciativa fue presentada el año pasado por el ex edil Alberto Cortés y estuvo a punto de perder estado parlamentario.
La propuesta apenas llegó a ser discutida en la comisión de Gobierno, "pero quisimos recuperarla porque creemos que es importante impulsar ese debate que tiene que ver con los derechos de las comunidades aborígenes", explicó Roldán. Y, justamente, el reingreso en el Concejo del proyecto coincide con la celebración de la Semana de los Pueblos Originarios que culminó ayer con un acto frente al Museo Histórico Julio Marc.
La discusión acerca de los símbolos patrios santafesinos no es nueva. Desde la conmemoración de los 500 años de la llegada de Cristóbal Colón a América, representantes de movimientos indigenistas solicitaron la modificación del escudo provincial. Y en la Legislatura santafesina se presentaron varios proyectos en este sentido sin que ninguno prosperara.
La actual bandera de la provincia, con sus tres bandas verticales (colorada, blanca y azul) y en el escudo de armas con su flechas y lanza en cruz de San Andrés fue aprobada por la Junta de Representantes en agosto de 1822. Y según destaca el historiador santafesino Ramón Lassaga, "en el lenguaje simbólico de ese escudo, las flechas cruzadas y la lanza vertical significan la barbarie del salvaje vencida por la lanza del caballero cristiano".
El presidente de la Junta de Historia de Rosario y especialista en emblemas, Miguel Carrillo, apunta otro dato. A partir de 1880, una vez acalladas las luchas entre unitarios y federales, "las banderas provinciales prácticamente desaparecieron". Y recién volvieron a recuperar protagonismo a partir de 1984.
Por esa fecha la Legislatura santafesina "readoptó" la bandera creada en 1822 que comenzó a hacerse visible en actos y dependencias provinciales, aunque su uso obligatorio en todos los edificios públicos recién se reglamentó en diciembre del año pasado.
La Capital
27.4.06
España entrega bandera en la que nació el escudo de Puerto Rico
Representantes del Gobierno español entregaron hoy en San Juan al Regimiento Fijo de Puerto Rico la primera insignia en la que apareció el escudo del país caribeño: la Bandera de Fortificación.
'Por su constancia, amor y fidelidad, esta ciudad es muy noble y leal', dice el escudo que otorgó el rey Carlos IV de España al primer regimiento español al que se pudieron incorporar criollos y que consiguió expulsar de San Juan en 1797 a las tropas del general inglés John Abercrombie.
'Si no, ahora estaríamos hablando en inglés', dijo a EFE Margarita Gandía, sanjuanera y apasionada por la historia que explicó que el General inglés, después de haber llegado a San Juan con 68 buques de guerra y 3.000 hombres, huyó 'dejando hasta su caballo y los muebles'.
La entrega, explicó a EFE el canciller del consulado de España en Puerto Rico, Gabino Iglesias, se realizó aprovechando la estancia durante los próximos seis días en San Juan del buque escuela español Juan Sebastián Elcano, decano de los mares con 79 años de navegación y 10 vueltas al mundo.
Terra
'Por su constancia, amor y fidelidad, esta ciudad es muy noble y leal', dice el escudo que otorgó el rey Carlos IV de España al primer regimiento español al que se pudieron incorporar criollos y que consiguió expulsar de San Juan en 1797 a las tropas del general inglés John Abercrombie.
'Si no, ahora estaríamos hablando en inglés', dijo a EFE Margarita Gandía, sanjuanera y apasionada por la historia que explicó que el General inglés, después de haber llegado a San Juan con 68 buques de guerra y 3.000 hombres, huyó 'dejando hasta su caballo y los muebles'.
La entrega, explicó a EFE el canciller del consulado de España en Puerto Rico, Gabino Iglesias, se realizó aprovechando la estancia durante los próximos seis días en San Juan del buque escuela español Juan Sebastián Elcano, decano de los mares con 79 años de navegación y 10 vueltas al mundo.
Terra
Propuestas artísticas para la bandera de Asturias
La lengua de los Rolling Stones, un toro solitario, sacos a rebosar de euros, un escanciador... Todo eso como bandera de Asturias. Es la exposición de Ruma Barbero, un veterano de los cómics y la ilustración que presenta su primera muestra individual. Todo aquel que pase por delante del Xiz Bar y detecte las pequeñas imágenes azules y amarillas arderá en deseos de verlas más cerca y leer los ingeniosos comentarios que las acompañan. «¿Qué es, que sólo podemos hacer una bandera con una cruz?», se pregunta Ruma.
-¿En qué consiste la exposición 'Asturies patria querida'?
-Son una serie de serigrafías industriales hechas en tela de bandera. Manteniendo los colores originales de la bandera asturiana y con la única variable del motivo dibujado hacemos varias propuestas de nuevos emblemas.
-¿Es un proyecto realizado en tono crítico o en tono de humor?
-Es un proyecto con un claro sentido crítico, aunque esto no quita que quiero que la gente se eche unas risas, sobre todo al leer los comentarios que acompañan a las banderas. Pero el objetivo final es claramente crítico, pretende denunciar la situación de abandono que vive Asturias en muchos sentidos y también descontextualizar un poco lo que son las banderas. Supongo que cada bandera es una invitación a reflexionar.
-¿Cómo ha reaccionado la gente que ha visto la muestra?
-Hace muy poco que la inauguramos así que todavía no hemos podido observar muchas reacciones, pero, en general, la gente se suele sorprender bastante. También hemos visto que a algunos no le ha gustado alguna de las banderas.
-¿Cuál de ellas?
-La que tiene el emblema de la marca Coca-Cola. A alguno no le ha parecido adecuado.
-Esta muestra colabora con los encuentros 'Les otres cares del planeta'. ¿Cómo surge la idea?
-Ya he colaborado musicalmente en alguna ocasión con los organizadores, conocían mi trabajo y quisieron contar con él.
-Si tuviese que escoger una de las banderas para que fuera el emblema de Asturias, ¿cuál sería?
-Creo que realmente no elegiría ninguna.
El Comercio Digital
Exhiben por primera vez la bandera mexicana capturada hace 170 años
Una bandera mexicana que fue capturada por independentistas texanos al ejército del general Antonio López de Santa Anna hace 170 años durante la Batalla de San Jacinto, comenzó a ser exhibida hoy aquí por primera vez al público.
La bandera tricolor, considerada como un tesoro histórico hasta ahora desconocido, está compuesta de tres piezas de seda y decorada con un delicado tejido del escudo mexicano de la época y con una marca en forma de V horizontal en una de sus puntas.
El estandarte, que es exhibido en una sucursal del Sterling Bank de Dallas, habría sido uno de cuatro que fueron capturadas al ejército mexicano bajo las órdenes de Santa Anna el 21 de abril de 1836 durante la Batalla de San Jacinto.
Vanguardia
La bandera tricolor, considerada como un tesoro histórico hasta ahora desconocido, está compuesta de tres piezas de seda y decorada con un delicado tejido del escudo mexicano de la época y con una marca en forma de V horizontal en una de sus puntas.
El estandarte, que es exhibido en una sucursal del Sterling Bank de Dallas, habría sido uno de cuatro que fueron capturadas al ejército mexicano bajo las órdenes de Santa Anna el 21 de abril de 1836 durante la Batalla de San Jacinto.
Vanguardia
12.4.06
LA TRICOLOR. BREVE HISTORIA DE LA BANDERA REPUBLICANA
El 14 de abril de 1931, hace ahora 75 años, las calles de las principales ciudades de España se veían inundadas por un tremolar de banderas tricolores que celebraban la proclamación de la Segunda República, y trece días más tarde el Gobierno Provisional promulgaba un decreto que determinaba en su artículo 1º la adopción como bandera nacional de la formada "por tres bandas horizontales de igual ancho, siendo la roja la superior, amarilla la central y morada oscura la inferior", una disposición ratificada posteriormente por la nueva Constitución. Con estas disposiciones se rompía una tradición bicolor que contaba ya con casi siglo y medio de existencia.
La bandera que la nueva República adoptaba como propia era la misma que numerosos grupos republicanos -aunque no todos- habían venido usando como alternativa a la enseña rojigualda, identificada por ellos con la monarquía, y por tanto representaba una idea de cambio radical en el sistema de gobierno del país. Su disposición en tres franjas de distinto color estaba probablemente influenciada por la tríada jacobina de "Libertad, Igualdad, Fraternidad" que los revolucionarios franceses habían extendido por toda Europa, pero la característica más llamativa de la nueva enseña era la introducción del color morado.
Este color era justificada en el Decreto por ser el "que la tradición admite por insignia de una región ilustre, nervio de la nacionalidad", dando con ello acogida y validez a una tradición que, a pesar de haber sido refutada por prestigiosos investigadores, había conseguido arraigar en las más diversas capas de la sociedad española: la tradición, leyenda o mito -como queramos llamarlo- del pendón morado de Castilla.
Desde mucho tiempo atrás el color morado se venía considerando como el propio de Castilla por la presencia del mismo en numerosos emblemas y enseñas relacionados de una u otra forma con el antiguo reino, y existía una correinte de opinión que sostenía que de ese color había sido el pendón que los comuneros habían alzado en su rebelión contra Carlos V. Esta idea reflejaba una visión de la revuelta comunera como una rebelión popular y democrática, que defendía las libertades castellanas frente al carácter centralizador y autoritario de la idea imperial de Carlos V. Por tanto, los comuneros habrían sido los precursores de todos los movimientos progresistas de España, desde los liberales de Riego a los federalistas. Sin embargo, y aparte de que los estudios más serios has desmontado esta imagen romántica, en ningún documento comunero de los conservados aparece alusión alguna al supuesto pendón morado, constando sin embargo que en la batalla de Villalar (1521) se distinguieron de sus enemigos mediante cruces rojas, mientras que los imperiales las usaron blancas. Luego, hasta donde sabemos, si hubo un color distintivo comunero fue el rojo de sus cruces.
Parece que el origen del malentendido se remonta al bienio constitucional abierto en 1821 con el pronunciamiento de Riego contra el absolutismo de Fernando VII, cuando surgieron las discordias en el seno de los liberales entre moderados y exaltados. Entre estos últimos fue muy activa una sociedad secreta conocida como Los Comuneros (probablemente por la razón antes apuntada), que usaban una bandera morada con un castillo. La radicalidad de sus posturas y lo llamativo de sus actitudes, con extravagantes pruebas de iniciación y ceremonias copiadas de la masonería, debió dar lugar a una identificación entre la causa revolucionaria y el color morado que ellos exhibían no sólo en sus banderas, sino también como distintivo personal, además de contribuir a la relación entre este color y el nombre de comuneros y, por extensión, de Castilla. Una prueba de lo primero es el hecho de que la bandera que en 1831 bordara en Granada Mariana Pineda para ser usada en un levantamiento liberal, y que le costó la ejecución, tuviera ese color.
De esta forma el morado comenzó a ser utilizado junto con los dos colores históricos en algunos ambientes republicanos, especialmente en los de tendencia federalista, ya que consideraban que el rojo y el amarillo, aparte de su identificación con la monarquía, sólo representaba a una parte de los pueblos integrantes de España, los vinculados con la antigua Corona de Aragón, por lo que el otro gran pueblo hispánico, el castellano, debía estar presente en la bandera mediante el color que, según la tradición, le era propio. Así, en tiempos próximos a la Revolución de 1868 la faja tricolor fue adoptada como distintivo de los concejales del Ayuntamiento madrileño.
Por lo tanto, desde el punto de vista político la bandera tricolor representó durante la mayor parte del siglo XIX la idea de un cambio radical que trajese a España un régimen republicano en el que los distintos pueblos de España estuviesen representados equitativamente.
Sin embargo, en otros ambientes de signo totalmente opuesto también arraigó esta tradición. Lo más significativo probablemente sea el que en 1833, cuando se produce la proclamación de Isabel II, se adopta un estandarte real morado, lo que reflejaba tanto un recuerdo del controvertido "pendón" como el apoyo de los liberales a la reina niña frente a los carlistas.
Este fenómeno confluye con otro que se produce en el ámbito militar, y que parece arrancar del Regimiento de Infantería de Castilla, actualmente denominado Inmemorial del Rey y considerado como el más antiguo del Ejército español, que adoptó uniforme morado en 1693, al parecer en recuerdo de haber tenido origen en unas tropas reclutadas por un obispo castellano en tiempos de Fernando III, lo que determinaría el color eclesiástico morado que fue su distintivo. Por ello fue conocido vulgarmente como Tercio de Morados, y de esta forma, el nombre de Castilla y el color morado se reunieron en las aspiraciones de antigüedad, y por lo tanto, de precedencia y privilegios, de una unidad militar que, dado su prestigio, despertó deseos de emulación entre otras unidades. Así, el Regimiento de Reales Guardias de Infantería Española obtiene desde su creación en 1703 el color morado para su bandera principal o coronela, en lugar de la blanca reglamentaria. El Regimiento de Castilla quiere también recuperar un color que considera propio, y solicitará repetidas veces el morado para su bandera, hasta que le es concedido en 1830, siendo imitado en los años posteriores por otros cuerpos y unidades. Cuando además, la propia monarquía adopta este color para su principal enseña, el estandarte, se refuerza en estas unidades el deseo de mostrar su vínculo con dicha institución mediante la exhibición del morado en sus banderas.
Pero quizá en el origen de todas estas historias subyazca una simple confusión cromática. Por una parte, la confusión terminológica entre púrpura, que en castellano designa a un tinte de un color rojo intenso, y que en realidad equivaldría a encarnado o carmesí, y el termino heráldico homónimo que se representa mediante el color morado, lo que habría dado lugar a que enseñas que en su origen eran rojas, al ser descritas como "púrpuras" acabasen siendo representadas como moradas. Esto es bastante evidente en un ámbito paralelo, en el caso de la figura del león que aparece en el escudo de España, y que siendo descrito durante siglos como "púrpura" era representado como de color rojo, y sólo a principios del siglo XIX empezó a ser pintado de púrpura heráldico, es decir, de morado. Por otra parte, es un hecho demostrado que la acción del tiempo puede hacer que los tintes rojos se oscurezcan hasta adoptar una tonalidad violácea, lo que se ha comprobado al examinar algunas banderas identificadas como "Pendón de Castilla", y que al ser sometidas a un detallado análisis han resultado ser rojas. Y tampoco hay que olvidar la amplia presencia del color morado en el ámbito religioso, desde vestiduras a ornamentos y estandartes, lo que sin duda debió influir en la aceptación de dicho color en un país de tan arraigada religiosidad.
De este modo, en vísperas del advenimiento de la Segunda República se producía la gran paradoja de que los republicanos como innovadores, y amplios sectores militares como inmovilistas, coincidían en considerar el color morado como representativo de Castilla.
Por ello, debe admitirse que en 1931 el color morado contaba con una tradición, no por infundada menos valiosa, que si no justificaba al menos hacía comprensible su inclusión en una enseña que pretendía simbolizar la pluralidad de los pueblos de España, desde un espíritu a la vez rupturista y respetuoso con el pasado. Sin embargo, cabe preguntarse si la decisión del nuevo régimen de adoptar la tricolor no fue un error que contribuyó a enajenar las voluntades de todos aquellos que consideraban a la bandera rojigualda como el verdadero símbolo de España, y no de la monarquía, sectores de la población cuya aceptación de la Segunda República se podría haber ganado conservando, como hizo la Primera, y como cuarenta y cinco años después hizo la Transición, los colores del paño y cambiando simplemente el escudo.
En cualquier caso, de lo que no cabe duda es de que la bandera tricolor forma parte del patrimonio histórico español, como símbolo de una época y de unos ideales, y como tal merece todo el respeto de los españoles de cualquier ideología.
José Manuel Erbez (imagen tomada de Flags of the World, realizada por Luis Miguel Arias)
La bandera que la nueva República adoptaba como propia era la misma que numerosos grupos republicanos -aunque no todos- habían venido usando como alternativa a la enseña rojigualda, identificada por ellos con la monarquía, y por tanto representaba una idea de cambio radical en el sistema de gobierno del país. Su disposición en tres franjas de distinto color estaba probablemente influenciada por la tríada jacobina de "Libertad, Igualdad, Fraternidad" que los revolucionarios franceses habían extendido por toda Europa, pero la característica más llamativa de la nueva enseña era la introducción del color morado.
Este color era justificada en el Decreto por ser el "que la tradición admite por insignia de una región ilustre, nervio de la nacionalidad", dando con ello acogida y validez a una tradición que, a pesar de haber sido refutada por prestigiosos investigadores, había conseguido arraigar en las más diversas capas de la sociedad española: la tradición, leyenda o mito -como queramos llamarlo- del pendón morado de Castilla.
Desde mucho tiempo atrás el color morado se venía considerando como el propio de Castilla por la presencia del mismo en numerosos emblemas y enseñas relacionados de una u otra forma con el antiguo reino, y existía una correinte de opinión que sostenía que de ese color había sido el pendón que los comuneros habían alzado en su rebelión contra Carlos V. Esta idea reflejaba una visión de la revuelta comunera como una rebelión popular y democrática, que defendía las libertades castellanas frente al carácter centralizador y autoritario de la idea imperial de Carlos V. Por tanto, los comuneros habrían sido los precursores de todos los movimientos progresistas de España, desde los liberales de Riego a los federalistas. Sin embargo, y aparte de que los estudios más serios has desmontado esta imagen romántica, en ningún documento comunero de los conservados aparece alusión alguna al supuesto pendón morado, constando sin embargo que en la batalla de Villalar (1521) se distinguieron de sus enemigos mediante cruces rojas, mientras que los imperiales las usaron blancas. Luego, hasta donde sabemos, si hubo un color distintivo comunero fue el rojo de sus cruces.
Parece que el origen del malentendido se remonta al bienio constitucional abierto en 1821 con el pronunciamiento de Riego contra el absolutismo de Fernando VII, cuando surgieron las discordias en el seno de los liberales entre moderados y exaltados. Entre estos últimos fue muy activa una sociedad secreta conocida como Los Comuneros (probablemente por la razón antes apuntada), que usaban una bandera morada con un castillo. La radicalidad de sus posturas y lo llamativo de sus actitudes, con extravagantes pruebas de iniciación y ceremonias copiadas de la masonería, debió dar lugar a una identificación entre la causa revolucionaria y el color morado que ellos exhibían no sólo en sus banderas, sino también como distintivo personal, además de contribuir a la relación entre este color y el nombre de comuneros y, por extensión, de Castilla. Una prueba de lo primero es el hecho de que la bandera que en 1831 bordara en Granada Mariana Pineda para ser usada en un levantamiento liberal, y que le costó la ejecución, tuviera ese color.
De esta forma el morado comenzó a ser utilizado junto con los dos colores históricos en algunos ambientes republicanos, especialmente en los de tendencia federalista, ya que consideraban que el rojo y el amarillo, aparte de su identificación con la monarquía, sólo representaba a una parte de los pueblos integrantes de España, los vinculados con la antigua Corona de Aragón, por lo que el otro gran pueblo hispánico, el castellano, debía estar presente en la bandera mediante el color que, según la tradición, le era propio. Así, en tiempos próximos a la Revolución de 1868 la faja tricolor fue adoptada como distintivo de los concejales del Ayuntamiento madrileño.
Por lo tanto, desde el punto de vista político la bandera tricolor representó durante la mayor parte del siglo XIX la idea de un cambio radical que trajese a España un régimen republicano en el que los distintos pueblos de España estuviesen representados equitativamente.
Sin embargo, en otros ambientes de signo totalmente opuesto también arraigó esta tradición. Lo más significativo probablemente sea el que en 1833, cuando se produce la proclamación de Isabel II, se adopta un estandarte real morado, lo que reflejaba tanto un recuerdo del controvertido "pendón" como el apoyo de los liberales a la reina niña frente a los carlistas.
Este fenómeno confluye con otro que se produce en el ámbito militar, y que parece arrancar del Regimiento de Infantería de Castilla, actualmente denominado Inmemorial del Rey y considerado como el más antiguo del Ejército español, que adoptó uniforme morado en 1693, al parecer en recuerdo de haber tenido origen en unas tropas reclutadas por un obispo castellano en tiempos de Fernando III, lo que determinaría el color eclesiástico morado que fue su distintivo. Por ello fue conocido vulgarmente como Tercio de Morados, y de esta forma, el nombre de Castilla y el color morado se reunieron en las aspiraciones de antigüedad, y por lo tanto, de precedencia y privilegios, de una unidad militar que, dado su prestigio, despertó deseos de emulación entre otras unidades. Así, el Regimiento de Reales Guardias de Infantería Española obtiene desde su creación en 1703 el color morado para su bandera principal o coronela, en lugar de la blanca reglamentaria. El Regimiento de Castilla quiere también recuperar un color que considera propio, y solicitará repetidas veces el morado para su bandera, hasta que le es concedido en 1830, siendo imitado en los años posteriores por otros cuerpos y unidades. Cuando además, la propia monarquía adopta este color para su principal enseña, el estandarte, se refuerza en estas unidades el deseo de mostrar su vínculo con dicha institución mediante la exhibición del morado en sus banderas.
Pero quizá en el origen de todas estas historias subyazca una simple confusión cromática. Por una parte, la confusión terminológica entre púrpura, que en castellano designa a un tinte de un color rojo intenso, y que en realidad equivaldría a encarnado o carmesí, y el termino heráldico homónimo que se representa mediante el color morado, lo que habría dado lugar a que enseñas que en su origen eran rojas, al ser descritas como "púrpuras" acabasen siendo representadas como moradas. Esto es bastante evidente en un ámbito paralelo, en el caso de la figura del león que aparece en el escudo de España, y que siendo descrito durante siglos como "púrpura" era representado como de color rojo, y sólo a principios del siglo XIX empezó a ser pintado de púrpura heráldico, es decir, de morado. Por otra parte, es un hecho demostrado que la acción del tiempo puede hacer que los tintes rojos se oscurezcan hasta adoptar una tonalidad violácea, lo que se ha comprobado al examinar algunas banderas identificadas como "Pendón de Castilla", y que al ser sometidas a un detallado análisis han resultado ser rojas. Y tampoco hay que olvidar la amplia presencia del color morado en el ámbito religioso, desde vestiduras a ornamentos y estandartes, lo que sin duda debió influir en la aceptación de dicho color en un país de tan arraigada religiosidad.
De este modo, en vísperas del advenimiento de la Segunda República se producía la gran paradoja de que los republicanos como innovadores, y amplios sectores militares como inmovilistas, coincidían en considerar el color morado como representativo de Castilla.
Por ello, debe admitirse que en 1931 el color morado contaba con una tradición, no por infundada menos valiosa, que si no justificaba al menos hacía comprensible su inclusión en una enseña que pretendía simbolizar la pluralidad de los pueblos de España, desde un espíritu a la vez rupturista y respetuoso con el pasado. Sin embargo, cabe preguntarse si la decisión del nuevo régimen de adoptar la tricolor no fue un error que contribuyó a enajenar las voluntades de todos aquellos que consideraban a la bandera rojigualda como el verdadero símbolo de España, y no de la monarquía, sectores de la población cuya aceptación de la Segunda República se podría haber ganado conservando, como hizo la Primera, y como cuarenta y cinco años después hizo la Transición, los colores del paño y cambiando simplemente el escudo.
En cualquier caso, de lo que no cabe duda es de que la bandera tricolor forma parte del patrimonio histórico español, como símbolo de una época y de unos ideales, y como tal merece todo el respeto de los españoles de cualquier ideología.
José Manuel Erbez (imagen tomada de Flags of the World, realizada por Luis Miguel Arias)
7.4.06
EEUU: Bandera mexicana es símbolo de orgullo, no separatismo
PHOENIX, Arizona, EEUU (AP) _ Los centenares de banderas mexicanas enarboladas por los partidarios de la reforma inmigratoria en sus marchas de las últimas semanas son una muestra de unidad cultural, no de deslealtad hacia Estados Unidos, según los manifestantes.
Muchos estadounidenses expresaron su disgusto. Periodistas conservadores fustigaron a los manifestantes, y en las cartas de lectores de los diarios muchos cuestionaron el patriotismo de los inmigrantes.
Algunos reclamaron que los que portan banderas mexicanas deberían regresar a México. Otros preguntaron por qué los inmigrantes que reclaman derechos en Estados Unidos portan el símbolo de otro país.
Pero los manifestantes, y los estudiosos de la inmigración, dicen que el orgullo por la herencia cultural no es falta de patriotismo hacia la nación adoptiva.
"Nadie se enfada con los irlandeses el día de San Patricio", dijo Gabriela Lemus, directora de política y legislación de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos con sede en Washington, el grupo que ha organizado muchas de las protestas recientes y es uno de los convocantes a las marchas a realizarse el lunes en todo el país.
Los que se oponen a ondear la bandera roja, blanca y verde han puesto en tela de juicio la lealtad de los manifestantes hacia Estados Unidos, pero los activistas latinos lo niegan.
"La bandera mexicana es como un símbolo de dignidad e identidad y orgullo para la gente que la porta", dijo Dolores Huerta, una fundadora del sindicato agrario United Farm Workers (Sindicato de Trabajadores del Campo) junto con el famoso César Chávez. "Quien trata de descubrir algo más detrás de esto, se equivoca".
Huerta, desde su casa en Bakersfield, California, dijo que llevó la bandera mexicana durante las movilizaciones agrarias de los 60 y últimamente en las marchas de Los Angeles y Tucson, Arizona.
"Significa orgullo y raíces", dijo. "De ninguna manera significa separación o nacionalismo en el sentido de que queremos regresar a México".
El politólogo Isidro D. Ortiz, profesor de estudios chicanos en la Universidad Estatal de San Diego, dijo que la bandera mexicana es ante todo un símbolo de orgullo. Pero en el clima reinante en Estados Unidos, los latinos también la usan para expresar insatisfacción con el trato que reciben.
"Desde hace tiempo, (los inmigrantes) tratan de imaginar que son parte de los Estados Unidos", acotó. "Pero la respuesta que reciben es el rechazo".
Univisión
Muchos estadounidenses expresaron su disgusto. Periodistas conservadores fustigaron a los manifestantes, y en las cartas de lectores de los diarios muchos cuestionaron el patriotismo de los inmigrantes.
Algunos reclamaron que los que portan banderas mexicanas deberían regresar a México. Otros preguntaron por qué los inmigrantes que reclaman derechos en Estados Unidos portan el símbolo de otro país.
Pero los manifestantes, y los estudiosos de la inmigración, dicen que el orgullo por la herencia cultural no es falta de patriotismo hacia la nación adoptiva.
"Nadie se enfada con los irlandeses el día de San Patricio", dijo Gabriela Lemus, directora de política y legislación de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos con sede en Washington, el grupo que ha organizado muchas de las protestas recientes y es uno de los convocantes a las marchas a realizarse el lunes en todo el país.
Los que se oponen a ondear la bandera roja, blanca y verde han puesto en tela de juicio la lealtad de los manifestantes hacia Estados Unidos, pero los activistas latinos lo niegan.
"La bandera mexicana es como un símbolo de dignidad e identidad y orgullo para la gente que la porta", dijo Dolores Huerta, una fundadora del sindicato agrario United Farm Workers (Sindicato de Trabajadores del Campo) junto con el famoso César Chávez. "Quien trata de descubrir algo más detrás de esto, se equivoca".
Huerta, desde su casa en Bakersfield, California, dijo que llevó la bandera mexicana durante las movilizaciones agrarias de los 60 y últimamente en las marchas de Los Angeles y Tucson, Arizona.
"Significa orgullo y raíces", dijo. "De ninguna manera significa separación o nacionalismo en el sentido de que queremos regresar a México".
El politólogo Isidro D. Ortiz, profesor de estudios chicanos en la Universidad Estatal de San Diego, dijo que la bandera mexicana es ante todo un símbolo de orgullo. Pero en el clima reinante en Estados Unidos, los latinos también la usan para expresar insatisfacción con el trato que reciben.
"Desde hace tiempo, (los inmigrantes) tratan de imaginar que son parte de los Estados Unidos", acotó. "Pero la respuesta que reciben es el rechazo".
Univisión
6.4.06
El Gobierno de Aragón autoriza el escudo y la bandera de Chalamera
Chalamera contará con escudo y bandera propios después de una espera de más de siete años, ya que ayer el Gobierno de Aragón comunicó su autorización, a propuesta del Departamento de Presidencia y Relaciones Institucionales. También el municipio vecino de San Miguel de Cinca es uno de los ocho que han recibido el visto bueno. Estas autorizaciones cuentan con el informe del Consejo Asesor de Heráldica y Simbología de Aragón.
El escudo de Chalamera adopta una forma cuadrilonga de base redondeada. En campo de gules, aparece un cabrio de azur, alzado, fileteado de plata, acompañado en lo bajo de una iglesia de plata, mazonada de sable y en los cantones del jefe se dibujan sendas espigas altas, de oro. Por su parte, la bandera consta de paño rojo con una proporción de dos tercios, posee dos franjas horizontales de color azul. En el asta, aparece una iglesia blanca con puertas y ventanas rojas, trayendo en la base una láurea de dos espigas amarillas. Unas características que se traducen en la unión de los símbolos más característicos del municipio según afirma su alcalde, Martín Bayona. “Aparece nuestro máximo símbolo, la ermita, además de nuestra situación geográfica expresada entre dos ríos, así como las espigas”.
La iniciativa surgió según Bayona, cuando leyó en una revista la posibilidad de diseñar estos símbolos de identidad. Sin embargo, los cambios en el diseño, que no fue del gusto de todos, retrasaron el proyecto. Con los primeros bocetos, algunos vecinos criticaban la excesiva presencia de Sender, “ellos preferían que apareciera nuestro máximo símbolo, la ermita”. Ahora que parece que Chalamera va a poseer definitivamente dos símbolos de identidad, encargarán un escudo para colocarlo en el Ayuntamiento, tal y como explica Bayona, quien manifiesta su satisfacción. Además, últimamente y una vez que los vecinos vieron los bocetos, preguntaban por el estado de los iconos.
En el caso de San Miguel de Cinca el escudo autorizado mantiene la misma forma, aunque los colores y los objetos son diferentes. Así por ejemplo, parecen tres torres, y cuatro almenas. La bandera consta de un paño azul celeste, partido por una banda amarilla fileteada en blanco y en la que se incluyen las tres torres de color rojo del escudo municipal.
La Mañana
El escudo de Chalamera adopta una forma cuadrilonga de base redondeada. En campo de gules, aparece un cabrio de azur, alzado, fileteado de plata, acompañado en lo bajo de una iglesia de plata, mazonada de sable y en los cantones del jefe se dibujan sendas espigas altas, de oro. Por su parte, la bandera consta de paño rojo con una proporción de dos tercios, posee dos franjas horizontales de color azul. En el asta, aparece una iglesia blanca con puertas y ventanas rojas, trayendo en la base una láurea de dos espigas amarillas. Unas características que se traducen en la unión de los símbolos más característicos del municipio según afirma su alcalde, Martín Bayona. “Aparece nuestro máximo símbolo, la ermita, además de nuestra situación geográfica expresada entre dos ríos, así como las espigas”.
La iniciativa surgió según Bayona, cuando leyó en una revista la posibilidad de diseñar estos símbolos de identidad. Sin embargo, los cambios en el diseño, que no fue del gusto de todos, retrasaron el proyecto. Con los primeros bocetos, algunos vecinos criticaban la excesiva presencia de Sender, “ellos preferían que apareciera nuestro máximo símbolo, la ermita”. Ahora que parece que Chalamera va a poseer definitivamente dos símbolos de identidad, encargarán un escudo para colocarlo en el Ayuntamiento, tal y como explica Bayona, quien manifiesta su satisfacción. Además, últimamente y una vez que los vecinos vieron los bocetos, preguntaban por el estado de los iconos.
En el caso de San Miguel de Cinca el escudo autorizado mantiene la misma forma, aunque los colores y los objetos son diferentes. Así por ejemplo, parecen tres torres, y cuatro almenas. La bandera consta de un paño azul celeste, partido por una banda amarilla fileteada en blanco y en la que se incluyen las tres torres de color rojo del escudo municipal.
La Mañana
Se limita el uso de banderas en la manifestación de inmigrantes en Dallas
Dallas.- La convocatoria a una manifestación de inmigrantes para el próximo domingo en Dallas, Texas, en la que sólo podrán portarse banderas estadunidenses al prohibirse la presencia de estandartes ajenos al país, generó controversia entre la población.
La invitación a la marcha, organizada por el distrito de Dallas de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC, por sus siglas en inglés), advierte que "No deberán ondearse banderas mexicanas, sólo banderas de Estados Unidos serán mostradas".
Los organizadores de la manifestación, que se estima será una de las mayores en la historia de Dallas, Texas, dijeron que distribuirán unas 14 mil banderas estadunidenses a aquellos que lleguen a la marcha sin estandarte.
Esta prohibición ocurre luego de que varios sondeos que mostraron que la opinión pública estadunidense veía mal la portación de banderas extranjeras en las marchas pro derechos de inmigrantes y que lesiona el esfuerzo de estos por obtener un trato justo.
Según las encuestas, más de 70 por ciento de los estadunidenses, respalda la idea de que si los inmigrantes desean su regularización en el país, deben adoptar la bandera de Estados Unidos y ondearla con orgullo.
Los inmigrantes por su parte han expresado que el portar en las manifestaciones la bandera de México o de sus respectivos países de origen, constituye una muestra de orgullo de sus raíces.
"El prohibir portar la bandera mexicana en la marcha es una acción antiinmigrante", dijo Alma Gómez, una mexicana con 11 años de residir en Estados Unidos, que planea participar en la manifestación.
Roberto Calderón, profesor de la Universidad del Norte de Texas, manifestó su duda de que los organizadores de la protesta puedan prohibir la portación de banderas extranjeras durante la marcha.
"Mucha de la gente que va a participar no va a leer los correos electrónicos que dicen que no traigas tu bandera mexicana; quien va a encargarse de aplicar esa restricción, de quitar las banderas", añadió.
La exhibición de banderas mexicanas, hondureñas, salvadoreñas y de otras naciones en las decenas de marchas recién efectuadas en el país para protestar por las iniciativas antiinmigrantes que son debatidas en el Congreso, ha causado incidentes en varios lugares.
La semana pasada, el director de la Escuela Preparatoria Reagan de Houston, fue amonestado por colocar la bandera mexicana en el asta del plantel, debajo de la estadunidense y de la de Texas, en apoyo a los estudiantes que son inmigrantes o hijos de inmigrantes.
En Colorado, docenas de estudiantes de preparatoria protestaron una directriz temporal que prohibía desplegar banderas estadunidenses o de cualquier nación como una forma de disminuir las tensiones raciales exacerbadas por las manifestaciones de los días recientes.
También en Dallas, directores de la Escuela Preparatoria Royse City HighSchool prohibieron a los estudiantes el llevar banderas a la escuela.
Rodolfo de la Garza, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Columbia, recordó que el debate sobre las banderas inicio en 1994.
Agregó que en ese año se analizaba en California la aprobación de la Proposición 187 con la que se negaría a los inmigrantes indocumentados varios servicios públicos como educación y salud.
De la Garza dijo que el uso de la bandera mexicana "generó mucho de la determinación", incluso entre los mexico-estadunidenses que se opusieron a la medida. La proposición 187 fue aprobada, pero su aplicación fue frenada por un juez federal.
"La marcha (del próximo domingo) es sobre el derecho de estar aquí, pero (el uso de banderas extranjeras) da el mensaje equivocado", consideró el académico.
Sin embargo, el prohibir banderas mexicanas y de otras naciones, hace que los organizadores incurran en una contradicción al contravenir la libertad de expresión, pues los inmigrantes "tienen el derecho ha hacerlo. Es parte de su libertad de expresión", subrayó.
Milenio
La invitación a la marcha, organizada por el distrito de Dallas de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC, por sus siglas en inglés), advierte que "No deberán ondearse banderas mexicanas, sólo banderas de Estados Unidos serán mostradas".
Los organizadores de la manifestación, que se estima será una de las mayores en la historia de Dallas, Texas, dijeron que distribuirán unas 14 mil banderas estadunidenses a aquellos que lleguen a la marcha sin estandarte.
Esta prohibición ocurre luego de que varios sondeos que mostraron que la opinión pública estadunidense veía mal la portación de banderas extranjeras en las marchas pro derechos de inmigrantes y que lesiona el esfuerzo de estos por obtener un trato justo.
Según las encuestas, más de 70 por ciento de los estadunidenses, respalda la idea de que si los inmigrantes desean su regularización en el país, deben adoptar la bandera de Estados Unidos y ondearla con orgullo.
Los inmigrantes por su parte han expresado que el portar en las manifestaciones la bandera de México o de sus respectivos países de origen, constituye una muestra de orgullo de sus raíces.
"El prohibir portar la bandera mexicana en la marcha es una acción antiinmigrante", dijo Alma Gómez, una mexicana con 11 años de residir en Estados Unidos, que planea participar en la manifestación.
Roberto Calderón, profesor de la Universidad del Norte de Texas, manifestó su duda de que los organizadores de la protesta puedan prohibir la portación de banderas extranjeras durante la marcha.
"Mucha de la gente que va a participar no va a leer los correos electrónicos que dicen que no traigas tu bandera mexicana; quien va a encargarse de aplicar esa restricción, de quitar las banderas", añadió.
La exhibición de banderas mexicanas, hondureñas, salvadoreñas y de otras naciones en las decenas de marchas recién efectuadas en el país para protestar por las iniciativas antiinmigrantes que son debatidas en el Congreso, ha causado incidentes en varios lugares.
La semana pasada, el director de la Escuela Preparatoria Reagan de Houston, fue amonestado por colocar la bandera mexicana en el asta del plantel, debajo de la estadunidense y de la de Texas, en apoyo a los estudiantes que son inmigrantes o hijos de inmigrantes.
En Colorado, docenas de estudiantes de preparatoria protestaron una directriz temporal que prohibía desplegar banderas estadunidenses o de cualquier nación como una forma de disminuir las tensiones raciales exacerbadas por las manifestaciones de los días recientes.
También en Dallas, directores de la Escuela Preparatoria Royse City HighSchool prohibieron a los estudiantes el llevar banderas a la escuela.
Rodolfo de la Garza, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Columbia, recordó que el debate sobre las banderas inicio en 1994.
Agregó que en ese año se analizaba en California la aprobación de la Proposición 187 con la que se negaría a los inmigrantes indocumentados varios servicios públicos como educación y salud.
De la Garza dijo que el uso de la bandera mexicana "generó mucho de la determinación", incluso entre los mexico-estadunidenses que se opusieron a la medida. La proposición 187 fue aprobada, pero su aplicación fue frenada por un juez federal.
"La marcha (del próximo domingo) es sobre el derecho de estar aquí, pero (el uso de banderas extranjeras) da el mensaje equivocado", consideró el académico.
Sin embargo, el prohibir banderas mexicanas y de otras naciones, hace que los organizadores incurran en una contradicción al contravenir la libertad de expresión, pues los inmigrantes "tienen el derecho ha hacerlo. Es parte de su libertad de expresión", subrayó.
Milenio
4.4.06
El pendón de Cáceres se restaura
Cuenta le leyenda que la reina Católica con sus propias manos bordó en el rojo pendón de San Jorge las nuevas armas de la villa, que han perdurado hasta el momento presente, así como el sello oficial del ayuntamiento. Pero no es sólo relevante el hecho de que doña Isabel la Católica tuviese entre sus manos el lienzo rojo que nos ocupa, sino además el que con su buen hacer y delicado tacto consiguió que se eliminasen la dualidad de sellos, el castillo por una parte y el león por otra, pues como se sabe el 23 de abril de 1229, como consta en los archivos, las huestes de Alfonso IX de León reconquistaron definitivamente para el mundo cristiano Cáceres, de esta forma la villa adopta como sus armas la de su monarca, es decir, un león.
También tanto Fernando IV (el amplazado) como más tarde Fernando III de Castilla utilizaron sus tropas a favor de la villa de Cáceres, lo que favoreció la idea de que algunos caballeros, de los asentados en esta ciudad, utilizaran oficialmente el escudo de Castilla: el castillo. Y es en este momento cuando surgen conflictos derivados de unas y otras armas, tan legítimas las primeras como las segundas. El uso de los sellos oficiales: el león y el castillo divide a esta ciudad en dos facciones bien diferenciadas.
Los cacerenses sufren esta situación hasta que con la llegada de los Reyes Católicos y gracias a la acertada actuación de Isabel la Católica desaparece este enfrentamiento, pues consigue la reina la eliminación de dicha dualidad, es así que en la quinta de las ordenanzas que doña Isabel dio a Cáceres el día 9 de julio de 1447 se lee: "Item mando y ordeno, que luego la justicia, regidores de esta villa, desfagan los dos sellos que tienen del concejo y faga uno, y no mas, que tenga un escudo de armas, y en la mitad del aya un castillo, y en la otra mitad un león; las quales dichas Ermas yo doi por armas propias suyas a la dicha Villa de Cáceres para siempre jamás, y que este sello esté siempre en poder de uno de los regidores y del procurador".
No se le puede negar a esta reina la importante contribución a esta ciudad al tomar tan hábil y acertada decisión. Nuestra bandera concejil ha sido testigo en las conmemoraciones de la reconquista de la ciudad.
Desde los años sesenta se encuentra en el despacho de la alcaldía, esta pieza emblemática de la historia local abandonará dicho despacho para ser restaurada y preparada, posteriormente formará parte de los fondos museísticos de la Sala Municipal de Exposiciones, que coincidiendo con las obras de restauración de este edificio en los próximos meses, y una vez que la Comisión de Cultura dio en el pasado mes de enero el visto bueno al proyecto de remodelación, conformará el tesoro municipal.
Sin duda, supondrá un gran enriquecimiento para la Sala Municipal de Exposiciones la existencia de la pieza más representativa de nuestra ciudad, donde la historia y la leyenda se entrecruzan en esta tela y que por diversos motivos ha estado restringida a la vista del público exceptuando en puntuales y contadas ocasiones.
Con objeto de que luzca como merece, tal pieza histórica se ha puesto en manos expertas, habiendo sido analizada recientemente por restauradores que se encargarán de tratarla y acondicionarla con acertadas y depuradas técnicas.
Como es de imaginar no es la primera vez que el pendón es restaurado, a lo largo de la historia ha sido acogido con las labores artesanales más adecuadas en cada momento para su mejor cuidado. Podemos citar en 1775 una de las intervenciones que tuvo lugar y que además se sabe que se encontraba en estado de deterioro evidente por el uso en siglos anteriores. Se hace fortalecer con un tafetán carmesí que da al Pendón de San Jorge su aspecto cromático actual. Una vez realizada esta delicada obra pasa a ser custodiada por el Marqués de Camarena la Real, Vicente de Ovando, que lo situó y cuidó en su propia casa.
Existen otras intervenciones, una de ellas en el segundo tercio del siglo XIX, otra en 1964 siendo alcalde Díaz de Bustamante, quien decide antes de colocarlo en su despacho limpiar y restaurar tal joya municipal. El valor de la tela ha sido resaltado por varios investigadores, siendo su opinión: de incalculable valor dada su antigüedad, el valor del bordado, etc. Pero, evidentemente, no es sólo el valor material, es más alto el valor simbólico, lo que supone para todos los cacereños, que además de por su significado nos sentimos orgullosos por tener la bandera concejil mas antigua de España y la primera en la que aparecen unidos los símbolos de dos reinos: el de Castilla y el de León.
Ahora que todo tiende a disgregarse, a dividirse, Cáceres puede decir que desde hace siglos su Pendón evidencia históricamente la unión, la unidad de los pueblos.
El Periódico de Extremadura
También tanto Fernando IV (el amplazado) como más tarde Fernando III de Castilla utilizaron sus tropas a favor de la villa de Cáceres, lo que favoreció la idea de que algunos caballeros, de los asentados en esta ciudad, utilizaran oficialmente el escudo de Castilla: el castillo. Y es en este momento cuando surgen conflictos derivados de unas y otras armas, tan legítimas las primeras como las segundas. El uso de los sellos oficiales: el león y el castillo divide a esta ciudad en dos facciones bien diferenciadas.
Los cacerenses sufren esta situación hasta que con la llegada de los Reyes Católicos y gracias a la acertada actuación de Isabel la Católica desaparece este enfrentamiento, pues consigue la reina la eliminación de dicha dualidad, es así que en la quinta de las ordenanzas que doña Isabel dio a Cáceres el día 9 de julio de 1447 se lee: "Item mando y ordeno, que luego la justicia, regidores de esta villa, desfagan los dos sellos que tienen del concejo y faga uno, y no mas, que tenga un escudo de armas, y en la mitad del aya un castillo, y en la otra mitad un león; las quales dichas Ermas yo doi por armas propias suyas a la dicha Villa de Cáceres para siempre jamás, y que este sello esté siempre en poder de uno de los regidores y del procurador".
No se le puede negar a esta reina la importante contribución a esta ciudad al tomar tan hábil y acertada decisión. Nuestra bandera concejil ha sido testigo en las conmemoraciones de la reconquista de la ciudad.
Desde los años sesenta se encuentra en el despacho de la alcaldía, esta pieza emblemática de la historia local abandonará dicho despacho para ser restaurada y preparada, posteriormente formará parte de los fondos museísticos de la Sala Municipal de Exposiciones, que coincidiendo con las obras de restauración de este edificio en los próximos meses, y una vez que la Comisión de Cultura dio en el pasado mes de enero el visto bueno al proyecto de remodelación, conformará el tesoro municipal.
Sin duda, supondrá un gran enriquecimiento para la Sala Municipal de Exposiciones la existencia de la pieza más representativa de nuestra ciudad, donde la historia y la leyenda se entrecruzan en esta tela y que por diversos motivos ha estado restringida a la vista del público exceptuando en puntuales y contadas ocasiones.
Con objeto de que luzca como merece, tal pieza histórica se ha puesto en manos expertas, habiendo sido analizada recientemente por restauradores que se encargarán de tratarla y acondicionarla con acertadas y depuradas técnicas.
Como es de imaginar no es la primera vez que el pendón es restaurado, a lo largo de la historia ha sido acogido con las labores artesanales más adecuadas en cada momento para su mejor cuidado. Podemos citar en 1775 una de las intervenciones que tuvo lugar y que además se sabe que se encontraba en estado de deterioro evidente por el uso en siglos anteriores. Se hace fortalecer con un tafetán carmesí que da al Pendón de San Jorge su aspecto cromático actual. Una vez realizada esta delicada obra pasa a ser custodiada por el Marqués de Camarena la Real, Vicente de Ovando, que lo situó y cuidó en su propia casa.
Existen otras intervenciones, una de ellas en el segundo tercio del siglo XIX, otra en 1964 siendo alcalde Díaz de Bustamante, quien decide antes de colocarlo en su despacho limpiar y restaurar tal joya municipal. El valor de la tela ha sido resaltado por varios investigadores, siendo su opinión: de incalculable valor dada su antigüedad, el valor del bordado, etc. Pero, evidentemente, no es sólo el valor material, es más alto el valor simbólico, lo que supone para todos los cacereños, que además de por su significado nos sentimos orgullosos por tener la bandera concejil mas antigua de España y la primera en la que aparecen unidos los símbolos de dos reinos: el de Castilla y el de León.
Ahora que todo tiende a disgregarse, a dividirse, Cáceres puede decir que desde hace siglos su Pendón evidencia históricamente la unión, la unidad de los pueblos.
El Periódico de Extremadura
3.4.06
Eibar iza la bandera republicana
La República, en un rincón de la Casa de Cultura de Portalea y vestida de rojo, amarillo y morado, observó el ir y venir de los eibarreses que acudieron el pasado viernes al acto inaugural de la exposición 'Los colores de la República'. Una muestra en la que 53 artistas con 60 obras han rendido homenaje a los colores de una bandera levantada por un pueblo que no tuvo tiempo de consolidarse y perdió, junto al morado de su última franja, los valores de libertad, igualdad y fraternidad.
Pinturas, carteles, esculturas, caricaturas, fotografías, textos literarios y filmaciones recogen un momento histórico para la villa de Eibar: la proclamación de la II República, que este año celebra su 75 aniversario.
El Correo Digital
Pinturas, carteles, esculturas, caricaturas, fotografías, textos literarios y filmaciones recogen un momento histórico para la villa de Eibar: la proclamación de la II República, que este año celebra su 75 aniversario.
El Correo Digital
Denuncian ante la Fiscalía la ausencia de la bandera de España en los edificios públicos
El partido Alternativa Española (AES), que se define a sí mismo como organización constitucionalista de derechas, ha presentado una denuncia ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana reclamando la presencia de la bandera española en las Torres de Serranos, el Palau de la Música y la Lonja de Valencia. Más exactamente exige que se investigue si la alcaldesa de la ciudad, Rita Barberá, y el delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé han incurrido en un delito de prevaricación por estas ausencias. Según Alternativa Española, en el último año se ha dirigido a ambos mandatarios exigiéndoles el cumplimiento de la Ley 39/1981 y la colocación de la bandera española en estos edificios públicos en igualdad de condiciones con la valenciana o la europea. Sin embargo, no han obtenido respuesta alguna de ninguno de ellos. Ahora, pues, han puesto los hechos en conocimiento de la Fiscalía del TSJ por si esta actitud supusiera «la comisión por omisión de un presunto delito de prevaricación de los previstos y penados en el artículo 4004 del vigente Código Penal».
Levante
Levante
La bandera del arco iris
Desde hace algún tiempo, he tenido curiosidad respecto del significado de la bandera que generalmente enarbola la Conaie como símbolo supuesto del Tahuantinsuyo y que ahora es empleada por el candidato peruano Ollanta Humala, como señal clara de que representa la perspectiva de un revivir del imperio incásico, al punto que en cada central de Humala, la presencia de la bandera es imprescindible.
La bandera que lleva franjas horizontales es la kurm wip’ala, es decir la bandera de los siete colores, símbolo de la descomposición “del hálito cósmico en la naturaleza del universo galaxial total y con respecto a nuestro planeta Tierra Pacha Mama, también es símbolo de la luz comunitaria”, de acuerdo a alguna interpretación indigenista, que sugiere a dicha bandera como un símbolo antiguo del Tahuantinsuyo. Sin embargo, hay historiadores en el Perú que de forma tajante señalan que la referencia histórica es “indebida e inequívoca”, ya que en el mundo prehispánico andino nunca se utilizó la bandera del arco iris la cual tuvo realmente sus orígenes en las primeras décadas del siglo pasado, cuando algunos autores trataron de resaltar la importancia del antiguo imperio incásico.
Curiosamente, la bandera del arco iris es utilizada a nivel global también como símbolo del movimiento gay desde el año 1979, razón por la cual muchos se habrán preguntado respecto de la similitud entre la bandera que porta el movimiento gay en sus manifestaciones y la que es utilizada por la Conaie en cada movilización o levantamiento. Sin embargo, debe aclararse que no se trata de emulación alguna al Tahuantinsuyo sino simplemente de un símbolo adoptado a raíz de la iniciativa de algún artista plástico.
Establecidos así los hechos, resulta que la Conaie ecuatoriana y el partido de Ollanta Humala utilizan la bandera del arco iris como un signo de un supuesto pasado común, mientras que la misma bandera es también empleada como símbolo de diversidad por otras corrientes.
En todo caso, cualquier discurso histórico respecto del buen o mal uso de la bandera del arco iris por parte de los movimientos indígenas andinos está basado en la revisión del Tahuantinsuyo como estructura histórica, razón por la cual esa discusión deberá hacerse básicamente en el Perú, en el futuro seguramente con el beneplácito de Humala, ya que es en ese país en donde se radicó y desde donde se expandió el poder del imperio incásico.
Ojo, los indígenas que habitaban lo que es ahora el territorio ecuatoriano fueron virtualmente avasallados por los incas en un proceso de total dominación. ¿Es procedente por lo tanto el uso de la bandera del arco iris por parte de la Conaie? Me temo que sí, antes que por la certeza histórica del tema, por la perspectiva propia del movimiento indígena ecuatoriano que ha preferido utilizar el símbolo de sus antiguos invasores, los incas, como signo elocuente de su pasado. ¿Nos estamos perdiendo de algo o es que no nos damos realmente cuenta de lo que pretende la Conaie?
Alfonso Oramas Gross (El Universo)
La bandera que lleva franjas horizontales es la kurm wip’ala, es decir la bandera de los siete colores, símbolo de la descomposición “del hálito cósmico en la naturaleza del universo galaxial total y con respecto a nuestro planeta Tierra Pacha Mama, también es símbolo de la luz comunitaria”, de acuerdo a alguna interpretación indigenista, que sugiere a dicha bandera como un símbolo antiguo del Tahuantinsuyo. Sin embargo, hay historiadores en el Perú que de forma tajante señalan que la referencia histórica es “indebida e inequívoca”, ya que en el mundo prehispánico andino nunca se utilizó la bandera del arco iris la cual tuvo realmente sus orígenes en las primeras décadas del siglo pasado, cuando algunos autores trataron de resaltar la importancia del antiguo imperio incásico.
Curiosamente, la bandera del arco iris es utilizada a nivel global también como símbolo del movimiento gay desde el año 1979, razón por la cual muchos se habrán preguntado respecto de la similitud entre la bandera que porta el movimiento gay en sus manifestaciones y la que es utilizada por la Conaie en cada movilización o levantamiento. Sin embargo, debe aclararse que no se trata de emulación alguna al Tahuantinsuyo sino simplemente de un símbolo adoptado a raíz de la iniciativa de algún artista plástico.
Establecidos así los hechos, resulta que la Conaie ecuatoriana y el partido de Ollanta Humala utilizan la bandera del arco iris como un signo de un supuesto pasado común, mientras que la misma bandera es también empleada como símbolo de diversidad por otras corrientes.
En todo caso, cualquier discurso histórico respecto del buen o mal uso de la bandera del arco iris por parte de los movimientos indígenas andinos está basado en la revisión del Tahuantinsuyo como estructura histórica, razón por la cual esa discusión deberá hacerse básicamente en el Perú, en el futuro seguramente con el beneplácito de Humala, ya que es en ese país en donde se radicó y desde donde se expandió el poder del imperio incásico.
Ojo, los indígenas que habitaban lo que es ahora el territorio ecuatoriano fueron virtualmente avasallados por los incas en un proceso de total dominación. ¿Es procedente por lo tanto el uso de la bandera del arco iris por parte de la Conaie? Me temo que sí, antes que por la certeza histórica del tema, por la perspectiva propia del movimiento indígena ecuatoriano que ha preferido utilizar el símbolo de sus antiguos invasores, los incas, como signo elocuente de su pasado. ¿Nos estamos perdiendo de algo o es que no nos damos realmente cuenta de lo que pretende la Conaie?
Alfonso Oramas Gross (El Universo)
El CCN critica "la bandera soriana" y pide a Soria que no derroche el dinero
El presidente del Centro Canario Nacionalista (CCN) criticó este sábado la "bandera soriana que le va a salir a los grancanarios la friolera de 360.000 euros", en referencia a la aprobación el jueves, por parte del grupo de Gobierno en el Pleno del Cabildo, de la instalación de una bandera de la Isla de grandes dimensiones en la Plaza de La Feria.
Canarias Ahora
Canarias Ahora
La bandera republicana ondeará en el Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) el 14 de abril
La bandera de la Segunda Republica ondeará en el balcón del Ayuntamiento de Sant Adrià de Besòs (Barcelona) el 14 de abril, fecha que se celebrará el 75 aniversario de la proclamación de la República.
El pleno del consistorio aprobó hoy una moción de reconocimiento de ese período histórico, de las "personas que creyeron y lucharon en la defensa del Estado Republicano" y de condena del levantamiento militar del 18 de julio de 1936, que "rompía un régimen democrático y que provocó una guerra civil, un régimen dictatorial y una brutal represión de 40 años".
La moción se aprobó con los votos del PSC, ICV-EUiA) y CiU, mientras que el PP se abstuvo. Además de izar la bandera tricolor el 14 de abril, el Ayuntamiento se compromete a colocar en un lugar visible una placa con los nombres de los alcaldes y concejales de la Segunda República.
Europa Press
El pleno del consistorio aprobó hoy una moción de reconocimiento de ese período histórico, de las "personas que creyeron y lucharon en la defensa del Estado Republicano" y de condena del levantamiento militar del 18 de julio de 1936, que "rompía un régimen democrático y que provocó una guerra civil, un régimen dictatorial y una brutal represión de 40 años".
La moción se aprobó con los votos del PSC, ICV-EUiA) y CiU, mientras que el PP se abstuvo. Además de izar la bandera tricolor el 14 de abril, el Ayuntamiento se compromete a colocar en un lugar visible una placa con los nombres de los alcaldes y concejales de la Segunda República.
Europa Press