LA PAZ (AP) - La multicolor bandera indígena -- la wiphala -- consagrada como símbolo nacional por la nueva Constitución, es ahora motivo de una nueva discordia entre el gobierno del presidente Evo Morales y los opositores.
La gobernación de Oruro, afín al gobierno, ha sido la primera en emitir una resolución obligando al izamiento de la wiphala en los actos públicos junto a la bandera nacional tricolor: rojo, amarillo y verde.
La bandera indígena asemeja a un tablero de ajedrez de siete colores: blanco, naranja, amarillo, rojo, azul, verde y violeta.
La resolución de Oruro señala que en todos los actos cívicos y oficiales deben izarse las dos banderas en cumplimiento de la nueva Constitución, en vigencia desde hace 12 días, que reconoce a la whipala como símbolo del estado plurinacional
Las gobernaciones de Santa Cruz y Tarija, opositoras a Morales, ya anunciaron su rechazo al nuevo emblema porque lo asocian al partido de gobierno.
El miércoles sólo el edificio de la Vicepresidencia en La Paz lucía en su fachada la enseña nacional junto a la bandera símbolo de los indígenas andinos.
En el Palacio Presidencial sólo lucía la tricolor al igual que en la gobernación de La Paz y en el edificio del Congreso Nacional.
El gobernador de Tarija, al sur de La Paz, Mario Cossío, opositor, dijo que en su región no se reconocerá a la enseña originaria. "Hay asuntos más relevantes", declaró a periodistas.
El alcalde de la ciudad, Oscar Montes, dijo que sería como obligar a rendir pleitesía a la bandera de un partido político.
El lunes el gobernador oficialista de Cochabamba, Jorge Ledezma, izó las dos banderas y el delegado presidencial en esa región Marco Carrillo dijo que cualquier "autoridad que desacate la decisión puede ir inclusive a la cárcel".
La nueva Constitución que da más derechos a los indígenas, reconoce siete símbolos del "Estado plurinacional": las dos banderas, el escudo de armas, la escarapela, y la kantuta, una flor del occidente del país, y el patujú, flor de la zona oriente.
El nuevo texto también reconoce como "patrimonio cultural" a la hoja de coca de la que Bolivia es tercer productor mundial y otorga igual rango que el castellano a las 35 lenguas de pueblos indígenas. Igualmente obliga a usar al menos dos lenguas en las oficinas públicas.
Historiadores aseguran que la wiphala no es originaria de las antiguas culturas prehispánicas y que la enseña surgió a finales de los 70 durante un congreso indigenista en momentos en que Bolivia retornaba a la democracia.
Morales ya había advertido que la puesta en vigencia de la nueva carta constitucional sería complicada. Tampoco ha tenido acogida entre los opositores regionales su llamado a diálogo para iniciar la aplicación paulatina del régimen de autonomías para las regiones.
Los autonomistas opositores han pedido un acuerdo nacional que incluya garantes internacionales para hablar con el gobierno, reiteró el miércoles gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario